Cada verano se producen en España entre 300 y 400 ahogamientos, la mayor parte en la playa y muchos de estos causados por corrientes de resaca (hasta el 80%). Es urgente, por lo tanto, divulgar y formar, a geólogos y no geólogos, sobre estos fenómenos naturales sobre los cuales todavía hay mucho desconocimiento. Además, las corrientes de resaca o de retorno también generan una intensa erosión litoral que ocasiona una considerable pérdida de arena de la playa y la consiguiente problemática asociada con su restauración.